La migración a la nube y el trabajo híbrido han transformado la forma en que operan las empresas… y también han abierto la puerta a nuevos riesgos de ciberseguridad. Dos enfoques están marcando la diferencia para proteger a las organizaciones modernas: SASE (Secure Access Service Edge) y Zero Trust. En este artículo exploraremos cómo funcionan y por qué, al combinarse, se convierten en la estrategia más poderosa para blindar tu negocio.
¿Qué es SASE?
Secure Access Service Edge (SASE) es un marco de seguridad y conectividad que une dos mundos tradicionalmente separados:
- La red (SD-WAN, optimización del tráfico, acceso seguro a aplicaciones).
- La seguridad (firewall, CASB, protección contra amenazas en la nube).
El resultado es una solución integrada que permite a las empresas ofrecer conexiones rápidas y seguras, sin importar si sus usuarios trabajan desde la oficina, casa o un café en cualquier parte del mundo.
¿Qué es Zero Trust?
Zero Trust se basa en un principio simple pero poderoso: “nunca confíes, siempre verifica”.
Esto significa que cada acceso —sin importar de dónde provenga— debe ser autenticado, autorizado y monitoreado en todo momento. Así se eliminan los supuestos de confianza que tradicionalmente daban entrada a atacantes dentro de las redes corporativas.
¿Cómo se complementan SASE y Zero Trust?
Aunque son marcos distintos, se potencian entre sí:
- SASE ofrece la infraestructura de seguridad distribuida y flexible.
- Zero Trust garantiza que solo los usuarios y dispositivos correctos tengan acceso.
Juntos permiten crear un entorno de seguridad integral para la nube, donde la conectividad es ágil y la protección es continua.
Ejemplos en entornos de trabajo híbrido
- Protección del acceso remoto
Un colaborador que trabaja desde casa se conecta a aplicaciones críticas. Con SASE, su tráfico pasa por una red optimizada y segura; con Zero Trust, se valida su identidad y dispositivo antes de otorgar acceso. - Seguridad en sucursales distribuidas
Una cadena con múltiples oficinas y tiendas conecta todo su ecosistema a través de SASE, mientras que Zero Trust asegura que cada empleado o dispositivo tenga permisos adecuados según su rol. - Reducción del riesgo de ataques internos
Con Zero Trust, incluso los usuarios internos deben autenticar su identidad constantemente. Al integrarse con SASE, estas validaciones ocurren de manera fluida y sin fricciones, reduciendo el riesgo de fugas de datos.
En un panorama digital donde los ataques son cada vez más sofisticados, ya no basta con proteger el perímetro tradicional. Las organizaciones que adoptan SASE y Zero Trust logran una seguridad robusta, adaptable y diseñada para el trabajo en la nube.
En Bexadata, ayudamos a las empresas a evaluar, implementar y optimizar soluciones de seguridad modernas, asegurando que tu información y la de tus clientes esté protegida en todo momento.
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